Componentes de un ecosistema

Los ecosistemas tienen cuatro componentes principales: materia y energía no biológicas, productores, consumidores y descomponedores.

Los productores son los componentes principales. Los productores juegan un papel fundamental en las comunidades biológicas. Asimilan la energía en el medio inorgánico. La cantidad de asimilación es el aporte total de energía al ecosistema, lo que mantiene todo el ecosistema. . Entre ellas, varias plantas verdes también pueden proporcionar hábitat y lugares de reproducción para diversos organismos, y los productores son los principales componentes del ecosistema.

Los descomponedores pueden descomponer diversas materias orgánicas complejas inanimadas (heces) del ecosistema en agua, dióxido de carbono, sales de amonio y otras sustancias que pueden ser reutilizadas por los productores, completando el ciclo material. Por tanto, los descomponedores, los productores y el entorno inorgánico pueden constituir un ecosistema simple, y los descomponedores son componentes necesarios del ecosistema. Los consumidores se refieren a organismos heterótrofos que se alimentan de plantas y animales. La gama de consumidores es muy amplia. Transfieren energía en el ecosistema a través de relaciones depredadoras y parasitarias.

Clasificación de ecosistemas

Los diferentes ecosistemas incluyen ecosistemas forestales, ecosistemas de pastizales, ecosistemas marinos y ecosistemas de agua dulce (divididos en ecosistemas lacustres, ecosistemas de estanques y ecosistemas fluviales), etc.), ecosistemas de tierras agrícolas, ecosistemas de tundra, ecosistemas de humedales y ecosistemas urbanos. Entre ellos, el ambiente inorgánico es la base de un ecosistema, y ​​la calidad de sus condiciones determina directamente la complejidad del ecosistema y la riqueza de las comunidades biológicas en él.

La comunidad biológica reacciona sobre el entorno inorgánico. La comunidad biológica en el ecosistema se adapta al entorno y cambia la apariencia del entorno circundante. Varios materiales básicos vinculan estrechamente a las comunidades biológicas con el entorno inorgánico, y la sucesión primaria de comunidades biológicas puede incluso convertir una tierra desolada y desnuda en un oasis con abundante agua y pasto. La estrecha conexión entre los distintos componentes del ecosistema hace que éste sea un todo orgánico con determinadas funciones.