Es posible que hayas tenido la experiencia de estar sentado en un aula y no tener idea de lo que dice el profesor, pero todos los que te rodean parecen estar bien. Esta experiencia puede resultar frustrante, pero hay una solución sencilla: ¡habla! Si se trata de un tema o concepto nuevo, puede estar seguro de que los demás estarán tan confundidos y confundidos como usted. En este caso, el tutor siempre estará encantado de volver a explicarlo.
2. Ante un tema aburrido, relájate
La verdad es que cada carrera tiene muchas unidades y al menos una de ellas es aburrida. Cuando esto sucede, obligarse a leer o completar una tarea puede resultar más difícil de lo habitual. Intente encontrar algo interesante en el tema desde un ángulo diferente o simplemente sumérjase en él. ¡La mayoría solo dura unas pocas semanas!
3. Pérdida de entusiasmo por el curso: incapaz de encontrar la intención original de aprender.
A mitad de camino de un curso que lleva años completar, puedes sentir que estás avanzando a través de un sinfín de lecturas, tareas y conferencias. No te preocupes, tarde o temprano aprenderás esta lección. Intente recordar tareas pasadas y declaraciones personales para recordar por qué comenzó a estudiar y reavivar su pasión por aprender.
4. No cumplir con la fecha límite: comuníquese con el instructor de inmediato.
Los plazos son estresantes y no cumplirlos provocará un enorme aumento del estrés. Sin embargo, no será el primero en no cumplir con una fecha límite y las escuelas cuentan con políticas para ayudarlo a retomar el rumbo. Todo lo que necesita hacer es actuar y hablar con su mentor o asesor y ellos le dirán qué remedios hay disponibles.
5. Obtener una calificación baja: sea positivo
Obtener una calificación baja en una tarea puede ser devastador, especialmente si se esfuerza mucho. Trate de no tomárselo como algo personal, lea los comentarios de su instructor y aplique estas sugerencias en su próxima tarea. Si no estás seguro de qué salió mal, programa una cita con tu tutor para averiguar qué salió mal y no volver a cometer el mismo error.
6. No hay tiempo para estudiar: establezca un horario viable y respételo.
Ya sea que se estudie a tiempo parcial o a tiempo completo, no tener tiempo para estudiar es un problema muy común. Responsabilidades como la familia y el trabajo requieren tiempo y energía. La mejor manera de superar esto es establecer un cronograma realista y cumplirlo. Alternativamente, puedes leer nuestras otras publicaciones de blog para aprender cómo encontrar estos pequeños momentos en tu día y aprovecharlos al máximo para ayudarte a completar tus tareas escolares.
7. Procrastinación: tómate un descanso de las distracciones.
Teléfonos, tabletas, televisores, computadoras, consolas de juegos: las pantallas están en todas partes, los juegos y las aplicaciones están diseñados para distraer y reducir la eficiencia en el trabajo. Si realmente tienes problemas para concentrarte, la forma más sencilla es dejar el teléfono, ir a la biblioteca y dejarlo en casa.
Incapaz de hacer frente a la carga de trabajo del estudio: haga un plan viable e impleméntelo.
Para los estudiantes de primer año, decidir un curso puede ser una tarea desalentadora, especialmente cuando los plazos y el recuento de palabras son un dolor de cabeza. Si siente que se está quedando atrás, no entre en pánico. Lo aprenderás rápidamente. Haga un plan realizable (y cúmplalo) y recuerde que su instructor ha diseñado una carga de trabajo manejable para usted y no le permitirá fracasar.