2. Respetar la individualidad de los niños: Cada niño es un individuo único. Los padres deben respetar la personalidad de sus hijos y no imponerles sus propios deseos y expectativas.
3. Dar la libertad adecuada: Dar a los niños algo de espacio libre, permitiéndoles la oportunidad de tomar sus propias decisiones y explorar el mundo, lo que les ayudará a cultivar su independencia y confianza en sí mismos.
4. Establecer reglas y disciplinas: Establecer algunas reglas y disciplinas claras en la familia para que los niños sepan lo que pueden y no pueden hacer. Esto ayuda a cultivar el sentido de responsabilidad y autodisciplina de los niños.
5. Predicar con el ejemplo: Los padres deben dar ejemplo y predicar con el ejemplo para que sus hijos puedan aprender valores y códigos de conducta correctos desde una edad temprana.
6. Animar a los niños a probar cosas nuevas: Animar a los niños a probar cosas nuevas y darles la oportunidad de descubrir sus intereses y potencial, lo que ayuda a estimular la creatividad y la motivación de los niños para aprender.