Cuando los núcleos atómicos se fisionan, producirán diversas partículas microscópicas y radiación o energía electromagnética, lo que se llama radiación nuclear.
Este tipo de radiación puede provocar que los electrones de la sustancia se exciten, incluso si la sustancia está ionizada o excitada, por lo que este tipo de radiación también se llama radiación ionizante. Esto incluye cuatro tipos principales de radiación: partículas alfa, partículas beta, rayos gamma y neutrones. La partícula alfa, el núcleo de helio, está compuesta por dos protones cargados positivamente y dos neutrones neutros.
Las partículas beta son corrientes de positrones o electrones negativos de alta energía. Los rayos gamma son ondas electromagnéticas con una energía relativamente alta y muy penetrantes. Además, después de un accidente nuclear se liberarán radionucleidos que se convertirán en nuevas fuentes radiactivas y se extenderán aún más. Por cierto, las ondas electromagnéticas que se encuentran en la vida diaria, como las cocinas de inducción y los teléfonos, son radiaciones no ionizantes. Este tipo de energía de radiación no es suficiente para excitar los electrones. Por lo tanto, no causará daño a los humanos a diario.
¿Qué efectos tendrá la radiación nuclear en el cuerpo humano?
En cuanto al efecto de la radiación nuclear en el cuerpo humano, debemos partir del nivel molecular. La radiación nuclear actúa sobre las células humanas y su efecto directo ionizará o excitará macromoléculas biológicas como el ADN, el ARN y las proteínas. Por otro lado, la radiación nuclear puede ionizar o excitar el agua de las células, haciendo que el pequeño punto con el grupo generado sea un arma muy peligrosa, representando los radicales libres.
Interactuará indirectamente con el H2O2 para provocar cambios en la estructura macromolecular y pérdida de actividad. En resumen, la radiación puede dañar las macromoléculas biológicas, dañando o matando así las células. La capacidad del cuerpo humano para reparar o destruir estas células dañadas tiene un cierto límite. Si estos daños por radiación exceden un cierto límite (umbral), el cuerpo humano eventualmente desarrollará algunas enfermedades, como cataratas, hipofertilidad, etc. Este efecto se conoce como. llamado efecto no aleatorio. Al mismo tiempo, dichos daños también aumentarán a medida que aumente la cantidad de radiación absorbida.