El vuelo que imaginaba era diferente a volar en un avión o en un globo aerostático. Ese tipo de vuelo proviene completamente del corazón, el proceso de encontrar la felicidad libremente.
Si pudiera volar, iría a la cima del lago Qinghai y miraría el espejo en el lago. Me veré volando. Quería caminar con las gaviotas, respirar el aire salado y dejar que el viento soplara en mi cara.
Si pudiera volar, iría a los pastizales de Sanke y abrazaría la tierra verde con las ovejas arrastrándose por los pastizales y los caballos corriendo. Tocaba las enormes nubes que se desmoronaban a mi alrededor mientras volaba. Seguiré al águila y volaré con ella hacia el sol.
Si pudiera volar, volaría al espacio. Me gustaría admirar nuestra tierra y la fiel luna que siempre gira a su alrededor. Quiero ir a más planetas para ver dónde hay especies alienígenas y dónde hay una segunda Tierra.
Si pudiera volar, iría a los lugares más pobres del mundo y llevaría felicidad y esperanza a la gente de allí. Si pudiera volar, iría a las cárceles y les daría a esos presos la fe para redescubrir la naturaleza.
Quiero volar, aunque se me rompan las alas; quiero volar, aunque haya nubes oscuras delante; quiero volar, no importa lo lejos que quiera;
Think Flying no se trata de buscar una arrogancia condescendiente, sino de apreciar la naturaleza y abrazar la libertad. Quiero volar, no para encontrar ese sentimiento especial que es diferente, sino para contagiar bondad y ganar felicidad.
Estoy listo. Me voy...