Desde esta perspectiva, aunque Judy usurpó el trono de forma inadecuada, no violó los intereses básicos de la familia real. El trono que tomó originalmente pertenecía a su familia y sus acciones no socavaron la estabilidad social. Por lo tanto, las generaciones posteriores tienen puntos de vista diferentes sobre la usurpación del trono por parte de Judy.
Además, Zhu Di también logró muchos logros durante su reinado, como la construcción de las Tumbas Ming, el traslado de la capital a Beijing y el lanzamiento de la "Batalla Jingnan", etc., lo que le valió muchos elogios de generaciones posteriores.
Además, Judy también es una persona buena en la lucha política. Después de tomar el trono, no purgó a los funcionarios públicos ni a los oficiales militares, sino que adoptó una política relativamente moderada, que rápidamente calmó la agitación política y le valió cierto apoyo y reconocimiento.
En general, aunque la usurpación de Judy fue un período oscuro en la historia, por diversas razones, no fue tan vilipendiado por las generaciones posteriores como otros usurpadores. Ya sea una evaluación histórica o un juicio realista, debemos hacer un análisis y un juicio integrales y objetivos.
Por lo tanto, desde esta perspectiva, la cuestión de que Judy usurpe el trono no es tanto un delito grave, sino el resultado de una lucha de poder interna, e incluso puede entenderse como el comportamiento de autorrescate de Judy.
Además, tras usurpar el trono, Judy también tomó una serie de medidas para hacer más estable su gobierno. Llevó a cabo una serie de reformas para debilitar el poder de los eunucos, fortalecer la centralización, reorganizar el ejército, sofocar rebeliones en varios lugares, expandir el territorio, construir magníficos edificios y promover la prosperidad del arte, la tecnología y la cultura.
Estas medidas no sólo ayudaron a consolidar su dominio, sino que también dejaron un importante legado histórico para las generaciones futuras, mostrando el talento y la sabiduría de Judy a la hora de gobernar el país.
Por lo tanto, a los ojos de las generaciones futuras, Judy no solo era un emperador con talentos políticos sobresalientes, sino también una persona cultural con cualidades culturales y visión histórica sobresalientes. Su vida no sólo tuvo un profundo impacto en la historia china, sino que también dejó un importante legado histórico y cultural para las generaciones futuras.