En el caso de menores de edad que cometan delitos, no se permite hacer públicos sus nombres y rostros.
Las leyes de nuestro país tienen instrucciones especiales sobre delitos juveniles y ninguna institución puede revelar la información y los materiales de los menores sospechosos. Esta es una medida de protección para sospechosos de delitos menores. Al mismo tiempo, la fase de prueba también está cerrada al público. Sólo los familiares pueden asistir a la audiencia.