En septiembre de 1912, el primer año de la República de China, la emperatriz viuda Yulong contrató a un maestro para que Puyi, de seis años, comenzara a aprender. Las salas de estudio se ubicaron inicialmente en diferentes librerías de Yingtai, Zhongnanhai. Aquí fue donde Cixi una vez puso al emperador Guangxu bajo arresto domiciliario. Entre los muchos maestros, Xu Fang, Chen, Zhu Yifan, Liang Dingfen, etc. enseñaron sucesivamente chino e Iqbal enseñó manchú. Durante sus estudios en 67 años, Puyi estudió principalmente los Trece Clásicos, poemas antiguos, prosa antigua, así como "El significado de la Universidad", "Instrucciones de la familia de Zhu Xi", "Instrucciones de la corte", "Oracle Guangxun", "Yu Lan" "Zi Zhi Tong Jian". Nunca aprendió aritmética, ni geografía ni historia.
La dinastía Qing tenía requisitos académicos muy estrictos para los emperadores, y tenían que ser excelentes en equitación, tiro con arco, literatura y poesía. Entonces, cuando Puyi todavía era emperador, recibió varios cursos, como los Cuatro Libros y los Cinco Clásicos. Puyi naturalmente memorizaba palabras y su maestro también era extraordinario. Por ejemplo, Chen y Yuan son académicos y presidentes de la Universidad de Pekín, y su profesor de inglés es John John, del Reino Unido.
La educación de Puyi es personalizada y práctica. Bajo la educación de tantos maestros excelentes, Puyi naturalmente aprenderá muy bien, especialmente su inglés fluido y su conversación sin esfuerzo con los extranjeros. En ese período feudal, se podría decir que la educación que recibió Puyi fue de primer nivel. Incluso si el coeficiente intelectual de Puyi no es alto, estará bien después de la tutoría individual.
Pero tras la fundación de la República Popular China, cuando Puyi fue a registrarse, se encontró con problemas en el ámbito educativo porque no había recibido una educación jerárquica y no sabía en qué nivel debía estar. completó una escuela secundaria. Pero si realmente quieres comprobarlo, redactar un diploma universitario es más que suficiente. Me temo que los estudiantes universitarios contemporáneos se avergonzarían. ¿Qué piensas? Bueno, ese es el final de la respuesta de hoy. No sé si esta respuesta te será útil, pero también puedes dejar un mensaje y discutirlo conmigo.