Socialmente hablando. La sociedad debería prestar más atención al acoso escolar. Aunque los incidentes de acoso ocurren con frecuencia, algunas personas en la sociedad piensan que se trata de un juego mezquino entre niños. Lo que debemos tener claro es que la capacidad mental de los niños es diferente a la de los adultos, pero sin una orientación adecuada, los niños pueden hacer cosas peores que los adultos. En las noticias sociales recientes, no es raro que los estudiantes de primaria se unan para robar dinero. Fortalecer la protección jurídica. Dado que la ley es una herramienta importante para mantener el orden social, si se quiere reducir fundamentalmente el acoso, primero se debe respetar la ley. Acelerar la mejora de las leyes y regulaciones sobre el acoso escolar para que los niños puedan vivir en un ambiente escolar seguro y crecer saludablemente. Dejemos que los acosadores utilicen la ley para restringir su comportamiento y que aquellos que merecen castigo sean castigados.
Desde la perspectiva escolar. Primero, reconocer el daño que el acoso escolar trae a los niños. El problema del acoso en el campus ha provocado que muchos niños se cansen de estudiar y muchos niños han pasado de ser acosados a acosar a otros. Las escuelas deben prestar atención al impacto del acoso en el campus, educar a los niños y sensibilizarlos sobre los peligros del acoso en el campus. Cultivar la capacidad de los niños para llevarse bien con los demás.
Desde casa. La educación moral es el contenido principal de la educación familiar. La familia es la primera parada para que los niños crezcan. Como padres, son a la vez educadores e imitadores de sus hijos. Cada movimiento de los padres afectará a sus hijos, por lo que los padres deben prestar atención a sus palabras y hechos. Además, los padres deben saber más sobre sus hijos, brindarles más ayuda cuando se encuentren con incidentes de acoso escolar y educar a sus hijos para que no participen en el acoso escolar.