Dewey escribió muchos libros y artículos educativos a lo largo de su vida. Entre sus principales obras se encuentran "Mi credo educativo", "Escuela y sociedad", "Los niños y el currículo", "Democracia y educación", "Experiencia y educación", "La educación de hoy", "Problemas humanos", etc. Entre ellos, "Democracia y educación" es la exposición más sistemática y concentrada del pensamiento educativo pragmático de Dewey. Como programa rector del movimiento educativo pragmatista estadounidense, tiene una influencia de gran alcance y también es un clásico en la historia de la educación mundial.
La filosofía del pragmatismo es la principal base teórica de la teoría educativa de Dewey. Dewey absorbió plenamente las opiniones filosóficas pragmatistas de Peirce y James y adquirió un nuevo significado: su filosofía de la emoción como herramienta de pensamiento. Consideró la filosofía como una herramienta para que las personas se adapten al entorno y organicen sus experiencias. Creía que la filosofía debe ser relevante para la vida real de las personas y debe estar dirigida a promover el desarrollo social y político. Dewey analizó que sólo a través de actividades educativas la cosmovisión y la metodología defendidas por la filosofía pragmatista pueden arraigarse profundamente en los corazones de las personas y ser generalmente aceptadas por la gente, y la filosofía puede desempeñar su papel más importante.
Dewey definió una vez la educación como "la transformación o reorganización de la experiencia". Creía que todo aprendizaje proviene de la experiencia; la educación debe partir de la experiencia, es decir, partir siempre de los siglos de experiencia de vida de los pueblos antiguos.