Métodos eficaces de educación familiar

1. Dale tiempo a tus hijos para que jueguen como quieran y no organices tu vida con demasiada regularidad.

Todos los niños necesitan un rato de juego relajante.

El estudioso estadounidense en educación infantil Thomas Armstrong cree que el juego libre es más saludable y beneficioso para los niños en edad preescolar que las actividades planificadas. Los padres deben evitar llenar el tiempo de sus hijos con una variedad de actividades. Todos los niños necesitan un rato de juego relajante.

2. Enseñar a los niños a preocuparse por los demás

Incluso los niños muy pequeños pueden sentirse felices ayudando a los demás y desarrollar el hábito de ayudar a los demás.

Los niños felices necesitan sentir que tienen conexiones significativas con los demás y comprender lo que significan para los demás. Para cultivar este sentimiento, puedes ayudar a tus hijos a tener más contacto con los demás. Puede ordenar algunos juguetes viejos con su hijo y donarlos a una organización benéfica para ayudar a los niños sin hogar. También se puede animar a los niños a participar en algunas actividades de voluntariado en la escuela. Los expertos señalan que incluso a una edad temprana, uno puede sentirse feliz ayudando a los demás y desarrollar el hábito de ayudar a los demás.

3. Animar a los niños a hacer más ejercicio.

Los deportes permiten que los niños se quieran a sí mismos y encuentren diversión y una sensación de logro.

Jugar a la pelota, andar en bicicleta, nadar con tu hijo... Hacer más deporte no sólo puede ejercitar la forma física de tu hijo, sino también hacerlo más alegre. Mantener una vida activa puede aliviar moderadamente el estrés y las emociones de los niños, permitiéndoles gustarse a sí mismos, tener una imagen corporal más positiva y encontrar diversión y una sensación de logro en los deportes.

4. Reír a menudo

Reír es un buen ejercicio.

Contar chistes, inventar algunas canciones divertidas y reír con tus hijos será bueno tanto para ti como para tus hijos. Simplemente reír es un buen ejercicio.

5. Elogios creativos

Cuando su hijo se desempeña bien, no se limite a decir "bien". Sea específico, hable sobre los detalles y señale lo que es impresionante o mejor que el anterior. tiempo. Por ejemplo, "Hoy tomaste la iniciativa de darle los buenos días al tío guardia. Fue muy educado".

Sin embargo, también debes prestar atención a los elogios y no desarrollar expectativas equivocadas en tus hijos. . Algunos padres recompensarán a sus hijos con obsequios o dinero para que puedan centrarse en las recompensas que pueden obtener en lugar de en su buen desempeño. Los padres deben dejar que sus hijos descubran la satisfacción y la sensación de logro que se obtienen al completar algo, en lugar de recompensarlos con recompensas materiales.

6. Asegúrate de que los niños coman sano.

Una dieta saludable mantiene a los niños sanos y emocionalmente estables.

Una dieta saludable no sólo hace que los niños estén físicamente sanos, sino que también los hace más estables emocionalmente. Ya sea en la cena o en la merienda, trate de seguir principios saludables, como una dieta baja en grasas, baja en azúcar, fresca y equilibrada.

7. Estimular los talentos artísticos internos de los niños

Exponer a los niños a la música, el arte, la danza y otras actividades puede enriquecer su mundo interior.

Aunque los científicos han confirmado que no existe el llamado "Efecto Mozart", exponer a los niños a la música, el arte, la danza y otras actividades aún puede enriquecer su mundo interior. Los expertos han descubierto que cuando los niños bailan con música o garabatean con un pincel, en realidad es una forma de que los niños expresen su mundo interior y expresen sus sentimientos. Los niños que disfrutan dibujando, bailando o tocando música se sentirán más satisfechos consigo mismos.

8. Abrazar con frecuencia

Los toques suaves y los abrazos pueden aliviar el estrés y calmar las emociones inquietas.

Un abrazo suave transmite cariño infinito y es un "te amo" silencioso. Los estudios han descubierto que el contacto suave y los abrazos pueden hacer que los bebés prematuros sean más sanos, más activos y más estables emocionalmente. Para los adultos, los abrazos también pueden aliviar el estrés y calmar las emociones inquietas.