¿Cómo pueden los pinos sobrevivir fácilmente después del trasplante?

Elija el momento adecuado para trasplantar su pino, preferiblemente a principios de la primavera, antes de la brotación. Cuando excave en busca de plantas, lleve consigo una bola de tierra. El tamaño de la bola de tierra debe ser de 5 a 6 veces el diámetro de la base del árbol. También es necesario cavar un hoyo un poco más grande en el área de plantación, dependiendo del tamaño de la bola de tierra. Si hay raíces dañadas, córtelas antes de enterrarlas y, preferiblemente, sumérjalas en una solución de enraizamiento durante un tiempo. Después del tratamiento, los pinos se pueden plantar en el suelo a una profundidad cercana a la original, no demasiado profunda. Después de plantarla, la regarás para devolverle la vida lo antes posible.

Deseo

Primero, el momento del trasplante

Para una mayor tasa de supervivencia, es necesario elegir el momento adecuado para trasplantar los pinos. La mejor época es principios de primavera, antes de que broten los pinos, cuando el suelo prácticamente se ha descongelado, especialmente a principios de febrero. Si se hace demasiado pronto y la temperatura es demasiado baja, afectará a la supervivencia de las raíces.

En segundo lugar, excave las plantas

Asegúrese de llevar bolas de tierra cuando excave pinos para proteger mejor las raíces. El tamaño de la bola de tierra suele ser de 5 a 6 veces el diámetro de la base del árbol. Después de excavar, átelo con una cuerda para evitar que la bola de tierra se afloje.

En tercer lugar, excave un hoyo para plantar.

Cava un hoyo un poco más grande en el sitio de plantación, más grande que la bola de tierra. Excavelo con anticipación y plántelo en el suelo lo antes posible para evitar una pérdida excesiva de agua y reducir la tasa de supervivencia. Se recomienda mezclar una cantidad adecuada de fertilizante base en el suelo para mejorar la fertilidad del suelo y permitir un crecimiento vigoroso en el período posterior.

Cuarto, plantar bajo tierra

Al plantar, si descubre que las raíces dañadas están cortadas, utilice un cuchillo afilado para cortarlas de forma prolija y no rasgada. Lo mejor es remojarlos en una solución de polvo de enraizamiento antes de enterrarlos. Esto tendrá una mayor tasa de supervivencia y promoverá una adaptación más rápida al nuevo entorno y la recuperación del crecimiento. La profundidad de plantación debe controlarse bien, no demasiado, y debe basarse en la profundidad original. Después del llenado, el suelo debe compactarse y regarse. También rocíe agua sobre hojas y ramas para aumentar la humedad, lo que puede favorecer la rápida recuperación de la vitalidad.