Xingzi es una mujer inteligente y capaz, buena en el recibidor y en la cocina. Kyoko es una mujer amable y filial. Mi suegra lleva cinco años paralizada y la ha estado sirviendo como una mierda. No tenía quejas de lo dura y cansada que era. Por el bien de su suegra y de sus hijos pequeños, tuvo que dejar su trabajo y trabajar como ama de casa a tiempo completo. En la vida, se preocupa por su marido y comparte sus preocupaciones y problemas en el trabajo. Manejó la casa con cuidado y la mantuvo en perfecto orden. Y capacitó a su hijo para que fuera estudiante en una universidad clave.
No sé cuándo mi marido ya no quiere volver a casa. Al principio, Xing pensó que su marido estaba ocupado en el trabajo y no le prestó atención. Poco a poco Xing descubrió que su marido, que tenía más de cincuenta años, amaba la belleza y siempre olía a perfume de mujer. Xingzi preguntó varias veces, pero su marido vaciló.
Una noche, mi padre enfermó y fue hospitalizado. De camino al hospital, Kyoko vio a su marido llevando a pasear a una mujer embarazada. Xing entendió todo. Soportó el dolor y corrió al hospital para cuidar de su padre. Bajo el cuidadoso cuidado de Kyoko, Gompa fue rápidamente dada de alta del hospital.
Myolie regresó a casa y llamó a su marido y le dijo que tenía algo importante que discutir.
Después de que su esposo regresó, Xing tranquilamente solicitó el divorcio. Su marido dijo descaradamente: "Mientras Xingzi no cause problemas, equilibrará la relación entre las dos partes".
Xing le dio un bocado a su marido por primera vez y le dijo claramente que el divorcio era necesario y no lo toleraría.
Unos días después, los dos pasaron por los trámites de divorcio y la casa y el hijo regresaron a Xing.
Kyoko es una mujer fuerte y segura de corazón. Después del dolor, para tener una vida mejor para su hijo y para ella misma, salió resueltamente de la casa que había dirigido durante muchos años, encontró una tienda, abrió un bar y se mantuvo a sí misma y a su hijo solos.
Después de este matrimonio fallido, Xing se volvió indiferente y cansado del matrimonio. Cuando todos tratábamos de persuadirla para que volviera, ella se negaba cortésmente y empezaba a sentirse sola.
Se acerca el invierno, ¿puede quedar muy atrás la primavera? Espero que la primavera de Kyoko llegue pronto y que haya amor que despierte su corazón para que ya no se sienta sola.