¿Cuáles son las características clínicas y el tratamiento de la neumonía por Haemophilus influenzae?

La neumonía por Haemophilus influenzae se complica fácilmente en pacientes con virus de la gripe o infección estafilocócica.

Este tipo de neumonía es relativamente rara clínicamente. Generalmente tiene un inicio lento y un curso subagudo. Sus manifestaciones clínicas y radiológicas son similares a las de la neumonía estreptocócica. Las características clínicas son las siguientes.

(1) Hay una tos espasmódica, muy parecida a la tos ferina, a veces parecida a la bronquiolitis.

(2) Los síntomas sistémicos son graves y los síntomas de intoxicación son evidentes. Como fiebre, dificultad para respirar o incluso insuficiencia respiratoria.

(3) El aumento de glóbulos blancos es evidente, de hasta 20 a 70×, acompañado de un aumento relativo o absoluto de linfocitos.

(4) La radiografía de tórax puede mostrar sombras miliares, a menudo fusionadas en la base de los pulmones.

(5) Los bebés suelen complicarse con empiema, pericarditis, sepsis, meningitis y artritis séptica.

(6) Susceptible a secuelas de bronquiectasias.

Sin embargo, el diagnóstico de neumonía por Haemophilus influenzae se basa en el cultivo de esputo. Para el tratamiento de esta enfermedad, dado que Haemophilus influenzae es un bacilo gramnegativo, la ampicilina es la primera opción, 100 a 150 mg/kg/día, inyección intramuscular o administración intravenosa, preferiblemente administración intravenosa. Cuando las bacterias son resistentes a la ampicilina, se pueden utilizar cefalosporinas, como cefotaxima, 50 a 150 mg/kg/día, por vía intravenosa.