Los terremotos suelen destruir un gran número de edificios y causar un gran número de víctimas. Los peligros de los terremotos incluyen daños a edificios y estructuras, como colapso de casas, rotura de puentes, grietas de presas, deformación de vías, etc., daños al suelo, como grietas, colapsos, salpicaduras de agua y erupciones de arena, etc.; montañas y otros objetos naturales, como deslizamientos de tierra, deslizamientos de tierra, etc.