El romance es un ensayo de enfermedad.

¿Tienes un par de ojos hermosos? No es la forma de tus ojos, sino si puedes sentir la sutil belleza de la vida.

Érase una vez, ingenuamente, le preguntaba a alguien una frase así. Me dirás que no sea supersticioso con mis ojos.

Creo que después de que el mundo ha sido pulido, cada vez más personas ya no tienen ojos puros y demasiadas personas ya no creen en los ojos de los demás.

Pero sigo creyendo que hay algunas personas que todavía tienen el mismo corazón juvenil de antes y no cambian sus intenciones originales.

De vez en cuando, da un paseo bajo las estrellas con amigos y haz algo normal y corriente. Pero la acuosa luz de la luna, la noche interminable, el fresco viento otoñal, las luces del mundo... En el silencio, mi corazón se ha vuelto gradualmente suave y confuso, como un helado dulce y refrescante que se derrite silenciosamente.

El romance es una enfermedad en algún momento y todos somos adictos a él. Parece que no hay cura. A menudo habrá un ataque improvisado en algún momento. Me encontraré con un amigo a miles de kilómetros de distancia y saldré para ver la misma luna brillante al mismo tiempo; haré todo lo posible por imaginármelo parado junto al río Amarillo. En el momento en que el teléfono esté conectado, le pediré que cierre los ojos suavemente y le leeré: "Después de que nos separamos, recuerdo haberte conocido y haber soñado varias veces con estar contigo..."

" Una persona que se enamora del romance fue la encarnación de una mariposa en su vida anterior." En esos días sin preocupaciones, cuenta cada pedacito, cada gota de un toque inolvidable. Cuando el amor que una vez tuve falleció como el viento, mi corazón gradualmente se volvió áspero y entumecido. No creo que los amentos sean los duendes de la primavera. No quiero capturar los latidos del corazón y la respiración de los demás en el teléfono. No quiero el arcoíris después de la lluvia. No quiero los meteoritos que pasan accidentalmente. ...

Tu Romance finalmente curó mi romance. Porque esos dolores y pérdidas profundos, en última instancia, requieren que la realidad los soporte; finalmente descubrí que la vida no es solo romance. Necesito enfrentar el viento y la lluvia reales contigo, en lugar de esperar el susurro etéreo bajo la llovizna a través de un paraguas.

A medida que pasa el tiempo, nuestras expresiones serán cada vez más tranquilas. Mirando hacia atrás, no me arrepiento. Sólo espero que hoy todavía tengas unos ojos hermosos y un corazón agudo e intuitivo. Dejemos que el romance se convierta en la verdadera sangre y alimento de la vida, en lugar de un sustento espiritual distante.