Los síntomas de las enfermedades del sistema urinario se pueden dividir en: 1. Aquellas con síntomas evidentes del sistema urinario: principalmente cambios urinarios, como micción frecuente, urgencia, dolor al orinar, enuresis, dificultad para orinar, etc.; cambios, como hematuria, piuria, quiluria, etc.; dolor que obviamente está relacionado con los órganos o partes del sistema urinario, como cólico renal, dolor de vejiga, etc. Si el paciente presenta tales síntomas, se puede realizar un diagnóstico preliminar basado en el historial médico y las manifestaciones sistémicas. El diagnóstico se puede confirmar mediante un examen de orina de rutina y exámenes especiales específicos, como rayos X, ecografía en modo B y otras imágenes y endoscopia. Los pacientes con infecciones del tracto urinario, cálculos y tumores (especialmente tumores de vejiga) entran principalmente en esta categoría. 2. Aquellos con síntomas sistémicos pero sin síntomas evidentes del sistema urinario. Los pacientes solo tienen fatiga, pérdida de apetito, pérdida de peso, fiebre baja, aumento de la presión arterial, etc., pero ningún síntoma evidente del sistema urinario. En este caso, la enfermedad es fácilmente ignorada. Por ejemplo, los pacientes con glomerulonefritis crónica pueden no presentar síntomas evidentes en el sistema urinario durante mucho tiempo hasta que se produce insuficiencia renal y, a menudo, buscan atención médica debido a falta de apetito o anemia. Algunos pacientes con tumores renales no presentan síntomas típicos como hematuria, masas y dolor, sino que solo presentan febrícula. En ausencia de síntomas urinarios, el examen de orina de rutina a menudo proporciona pistas importantes. Por ejemplo, la proteinuria en la glomerulonefritis crónica y el aumento de glóbulos rojos en la orina (hematuria al microscopio) en los tumores son muy útiles en el diagnóstico. Cuando las causas de febrícula, anemia, edema, hipertensión, etc. son inciertas, se debe prestar atención al examen de orina y repetir el examen si es necesario. Las enfermedades sistémicas como la diabetes, la gota y las enfermedades profesionales pueden causar enfermedad renal secundaria y los medicamentos también pueden causar daño renal. Se debe tener cuidado de no pasar por alto el diagnóstico. 3. Las enfermedades asintomáticas del sistema urinario, el diagnóstico precoz y el tratamiento precoz de la enfermedad son muy importantes. Por lo tanto, los exámenes de salud periódicos son extremadamente importantes. Los exámenes de salud para enfermedades del sistema urinario deben incluir un tacto rectal (para comprender el estado de la próstata), un examen de orina de rutina y un examen de ultrasonido de los riñones en modo B.