¿Cuál es la tercera profecía de Fátima? La autenticidad del análisis del contenido de la profecía ha sido cuestionada.

Hay un pequeño pueblo llamado Fátima en Portugal. Aquí circula una leyenda muy aterradora. Estas son las tres profecías del incidente de Fátima que más tarde supimos. ¿Cuáles son estas tres profecías?

El 13 de mayo de 1917, tres pequeños pastorcitos estaban jugando en el pequeño pueblo de Fátima, de repente vieron llegar a una mujer en una nave espacial sobre un roble. La mujer pidió a los tres niños que vinieran a verla el día 13 de cada mes, y los tres encantadores niños realmente escucharon las palabras de la mujer.

Cuando los niños le cuentan estas cosas a los adultos, naturalmente no lo creen, pero el 13 de septiembre, los niños vinieron a jugar junto al roble como de costumbre, pero escucharon a una mujer gritar. Era mediodía, el cielo se oscureció repentinamente y una nave espacial con luz apareció frente a los ojos de la gente. Todos los que la vieron se sorprendieron.

La gente se maravilló del aspecto de la mujer, por eso la llamaron Nuestra Señora de Fátima. Nuestra Señora de Fátima dejó tres profecías antes de partir. La primera profecía fue una visión del infierno que mostró a todos que el infierno es real.

La segunda profecía mencionaba que el tiempo de la Primera Guerra Mundial era limitado, y los humanos no vivirían en las dificultades de la guerra para siempre. Después de la guerra, los humanos tendrían un corto período de paz, pero sí la Segunda. Mundo La guerra también vendrá.

La tercera profecía, que según ella sería bloqueada por el Papa, no sería anunciada hasta el año 2000. Su contenido afirmaba principalmente que desde 1999 hasta el final del siglo XXI, la humanidad sufriría un enorme castigo por parte de la gallinero.

En realidad, existen muchas dudas sobre la autenticidad de las tres profecías de Nuestra Señora de Fátima. Aunque las tres profecías de Fátima han causado mucho revuelo en los países occidentales, parecen ser indiferentes a los chinos. . Si es verdadera o falsa, de hecho, los eventos ya sucedieron. Mirando hacia atrás y considerando el contenido de la profecía, solo las generaciones futuras decidirán si es verdadera o falsa. Debemos creer que los tiempos que vivimos ahora son maravillosos, y lo más importante es vivir el presente, y no preocuparnos por las llamadas profecías.