Perdí mi felicidad no hace mucho, así que la busqué por todas partes.
Vine al parque infantil de la comunidad. Aquí estoy en el columpio. A medida que el columpio subía más y más, sentí como si estuviera volando. En ese momento descubrí que el secreto de la felicidad es mantener siempre una inocencia infantil.
Llegué a la escuela con mi mochila a la espalda y escuché la sencilla conferencia del maestro. Cuando la maestra hizo una pregunta difícil, levanté la mano derecha y di una respuesta maravillosa, que se ganó el aplauso de la maestra y los compañeros. En ese momento descubrí que el secreto de la felicidad es tener un gran conocimiento.
De camino a casa, presté el "Pokemon" recién comprado a mis compañeros. Cuando descubrí que a mis compañeros también les gustaban los elfos, salté de emoción. En ese momento descubrí que el secreto de la felicidad es compartir la felicidad con los amigos.
Mi madre volvió del trabajo. La miré sudando profusamente, le entregué una toalla para secarse el sudor y le serví un vaso de agua fría. Mi madre lo bebió de una vez y sonrió cómodamente. En ese momento descubrí que el secreto de la felicidad es honrar a tus padres.
Descubrí el secreto de la felicidad. ¡Mientras tenga un corazón agradecido, siempre tendré felicidad!
Comentarios: ¿Dónde está el corazón, dónde está el amor? En el camino para encontrar la felicidad, la “felicidad” que surge en mi corazón queda plenamente demostrada.
En una noche de verano, la luna deja ver lentamente la mitad de su cara, volando entre las nubes como un loto blanco. Mi padre y yo estábamos en la orilla del río, mirando la cabaña silenciosa bajo la luz de la luna, las montañas silenciosas a lo lejos y la naturaleza infinita a nuestros pies. Nuestros corazones están tranquilos y tranquilos.
En ese momento, de repente vi la luz parpadeante en los campos de arroz del mismo espesor. Al principio fue poco a poco, pero luego en pequeños grupos vimos los puntos brillantes. Me sorprendió cuando mi padre susurró: "Miren, luciérnagas". Oh, sabía que eran estos elfos.
Le rogué a mi padre que me atrapara uno y él accedió. En la palma de la mano de su padre, la pequeña luciérnaga batió sus alas impotente y parpadeó. Si miras de cerca, resulta que sus partes brillantes están a ambos lados del vientre. Sostuve suavemente su vientre con mis manos y su luz desapareció instantáneamente. "Es realmente interesante". Estaba muy feliz. "¿Qué más encontraste?", Preguntó papá. Miré las luciérnagas y de repente tuve una idea y dije: "Su luz no es caliente". "Sí. Por eso mucha gente llama a su luz luz fría". "Sólo brilla, no calienta. Es muy interesante". Entonces surgió la pregunta: "¿Por qué los humanos no podemos hacer alguna investigación científica con la ayuda de las funciones especiales de las luciérnagas?" Papá sonrió: "Bueno, esperemos hasta que mi hijo crezca para estudiarlo". Suéltala. La pequeña luciérnaga se escapó rápidamente y su luz brillante desapareció lentamente a la luz de la luna.
Esta noche de verano descubrí algo de nuevo, ¿no?