El punto principal del existencialismo de Heidegger es la libre elección.
Heidegger señaló que la libertad humana es absoluta porque los seres humanos viven en un mundo aislado e indefenso y son "arrojados" al mundo; Dios, la ciencia, la razón, la moral, etc. no tienen influencia sobre ellos. Son irrelevantes para las personas, es decir, no pueden decirnos la verdad de la vida o la forma de vida. Al mismo tiempo, no tienen ningún efecto de control o restricción sobre las personas. Por eso el hombre tiene libertad absoluta.
El existencialismo reconoce que la libertad humana se expresa en dos aspectos: elección y acción. Sólo a través de las acciones que uno elige se puede realizar la libertad, porque la esencia de uno está determinada por las acciones que uno elige.
La libertad individual se manifiesta primero al darse cuenta de que carece de libertad debido a que está limitado por la cultura y las costumbres tradicionales. Por lo tanto, lo más importante para las personas es comprender la importancia de la elección y seguir sus propias elecciones. Actúe y asuma la responsabilidad de la vida.
La teoría trágica del existencialismo:
En opinión de los existencialistas, las personas viven en un mundo opuesto a ellos mismos y decepcionado, y su estatus en el mundo no es el mismo. Definitivamente. Las personas absolutamente libres también son personas solitarias, atribuladas e indefensas.
Aunque las personas tienen libertad de elección, la vida futura a la que se enfrentan es caótica y sin objetivos. Simplemente caminó ciegamente hacia el futuro. Sólo sabía que el verdadero fin de la vida era la muerte. La muerte, como destino final de la vida, es de gran importancia para la existencia personal.