Mejorar las habilidades de conducción: los conductores experimentados pueden utilizar simuladores para mejorar las habilidades de conducción, especialmente en condiciones especiales de la carretera o situaciones de emergencia. El simulador puede simular diversas condiciones climáticas, condiciones del tráfico y tipos de carreteras para ayudar a los conductores a enfrentar mejor los diferentes desafíos de conducción.
Situaciones de conducción de alto riesgo: Los simuladores se pueden utilizar para entrenar a los conductores para que manejen situaciones de alto riesgo, como frenadas bruscas, derrapes y pérdida de control. Este tipo de ejercicio puede mejorar la velocidad de reacción y la tranquilidad del conductor en situaciones de emergencia. En general, un simulador de conducción de automóviles es una herramienta útil de formación e investigación que mejora las habilidades de conducción y aumenta la seguridad.