Sin embargo, hay buenos y malos amigos, y hacer amigos tiene sus pros y sus contras. Si haces un "buen amigo", él puede ayudarte a progresar; si haces un "mal amigo", este puede ser el comienzo de tu caída. Entonces, ¿cómo deberíamos hacer amigos?
En primer lugar, corrige tus propios valores. Los pájaros del mismo plumaje se juntan y las personas se dividen en grupos. Qué tipo de valores tienes, habrá qué tipo de necesidades, y este tipo de necesidades te permitirá hacer cierto tipo de amigos. Para elegir un buen amigo, primero debes prestar atención a corregir tus propios valores.
En segundo lugar, se debe mejorar la capacidad de reconocimiento. Algunas personas suelen señalar los defectos y errores de sus amigos. Aunque a veces pueda parecer incómodo, esos amigos pueden ser beneficiosos. Algunas personas siempre consiguen lo que quieres, hablan con dulzura y hacen que la gente se sienta cercana a ti, pero esos amigos también pueden ser perjudiciales.
En tercer lugar, apégate a personas con ideas afines. La afinidad es el vínculo más importante para establecer, consolidar y desarrollar la amistad. Debemos hacer amigos sobre la base de ideas afines, ayudarnos mutuamente en la vida, el trabajo y la carrera y progresar juntos.
Por supuesto, cuando te comunicas con amigos, debes prestar atención al arte. La confianza es el puente de la amistad. Los amigos deben confiar unos en otros. Mientras realmente se traten unos a otros con sinceridad y muestren su sinceridad, los demás confiarán en ustedes y los tratarán con la misma actitud. Sólo las personas de mente abierta pueden hacer amigos. Es posible que tu amigo tenga algunos defectos o errores. Debes aprender a ser tolerante y tolerar los errores de otras personas. Es inevitable que haya diversos conflictos, diferencias y malentendidos entre amigos. Mientras no sea una cuestión de principios, no te aferres a ello.
La amistad entre amigos se basa en la sinceridad y los intereses comunes, no en palabras dulces ni en regalos. El intercambio material, los halagos repugnantes, el uso mutuo e incluso engañar a los amigos son cosas indeseables. La verdadera amistad debe resistir la prueba del tiempo y las circunstancias externas.