Lei Feng, nuestro buen modelo a seguir.
Sentarse y caminar erguidos, comportarse de manera digna y comportarse de manera civilizada y educada.
Bañarse frecuentemente, cambiarse de ropa frecuentemente y ser civilizados y autodisciplinados.
Se deben respetar a los estudiantes, a los vecinos y a las costumbres nacionales.
Sea generoso y educado al recibir invitados extranjeros.
Énfasis en la etiqueta y la etiqueta, allanando el camino para la vida social.
Los profesores trabajan día y noche, no sé cuántas tareas han corregido y no sé cuántas noches han faltado. Bajo su guía, aprendimos a ser una persona ambiciosa, una persona noble, una persona moral y una persona beneficiosa para el pueblo. Bajo su cuidadosa guía, innumerables personas se han embarcado en el camino hacia el éxito. Aman su trabajo, dan todo lo que tienen y siempre recompensan la felicidad de los demás. Son como una vela, se queman a sí mismos e iluminan a los demás. ¿No son nuestros esfuerzos el sucesor de Lei Feng?