Estoy orgulloso de ser un estudiante universitario.
La vida universitaria es maravillosa. Toda la vida en la escuela es nueva. Nuevos profesores, nuevos compañeros de clase y nuevos amigos están a mi alrededor. Sentí su amistad, amplitud de conocimientos y apertura de mente. Me sentí muy atraído por la magnífica biblioteca, los edificios escolares y los amplios patios de recreo. Tengo muchas ganas de aprender mucho rápidamente. En la escuela secundaria me conocían como el corredor. Ahora sé que en realidad estoy demasiado atrás. Espero ponerme al día con los tiempos estudiando mucho. Todos los días puedes verme levantarme temprano, hacer mucho ejercicio y ser el primero en ir a la escuela. Por la noche fui yo quien salió de la biblioteca. Lo más gracioso es que no puedo hablar bien mandarín y al principio hago muchas cosas interesantes porque soy del sur.
Además de estudiar, mi vida universitaria también es muy colorida. Quiero aprovechar cada oportunidad para mejorar mis habilidades comunicativas. Soy el monitor y juego un papel activo en la clase y el colegio. El año pasado organicé un concurso de oratoria en el Departamento de Gestión. Todos los estudiantes están muy interesados en esta actividad. Aprendí mucho de ellos sobre su ciudad natal, sus conocimientos y perspectivas. Al mismo tiempo, les muestro a todos mi hermosa ciudad natal. En la escuela, me preocupo por todos los estudiantes que me rodean. Soy muy pobre porque vengo de una zona rural remota. La escuela pagó la mayor parte de mi educación. Me siento muy feliz. Sin embargo, sé que algunos estudiantes son más pobres que yo. Quiero preocuparme por ellos y animarlos.
Mi vida universitaria es maravillosa. Creo que puedo pasar estos cuatro maravillosos años.