1. Alta flexibilidad: la naturaleza del trabajo de los profesores contratados es flexible y puede ajustarse de manera flexible según las necesidades de la escuela, ya sea a corto o largo plazo. impartir clases o impartir cursos especiales.
2. Baja presión laboral: Los profesores contratados tienen poca presión laboral y no necesitan asumir demasiadas tareas administrativas y de gestión, por lo que pueden centrarse más en la enseñanza.
3. Oportunidades de desarrollo profesional: una vez que los docentes contratados hayan acumulado cierta experiencia y habilidades en la enseñanza, tendrán la oportunidad de convertirse en docentes regulares u obtener mejores oportunidades de desarrollo profesional en otras escuelas o instituciones.