Disciplina positiva: la llave mágica para la mente de su hijo

La disciplina positiva nos proporciona una gran cantidad de herramientas para ayudarnos a afrontar con calma los desafíos que traen nuestros hijos y también nos muestra una nueva perspectiva sobre la crianza de los hijos. Sus conceptos centrales: amor y respeto, nos permiten entender que la crianza de los hijos no es una simple educación, sino un proceso de crecimiento personal y mejora.

La psicología de Adler es la piedra angular.

La disciplina positiva se basa en la psicología adleriana y aboga por la armonía y la unidad de los individuos, la sociedad y los demás. Esta perspectiva trasciende los valores binarios tradicionales y se centra más en la elección, la responsabilidad personal y el significado de la vida.

Visión positiva

La teoría de Adler enfatiza que no es el pasado lo que importa, sino cómo lo vemos. Esta perspectiva positiva nos permite comprender que no es el éxito o el fracaso de cualquier experiencia en sí misma, sino el significado que le damos a esa experiencia lo que determina nuestro futuro.

Desarrollar una actitud optimista y segura.

En términos de crianza, no podemos brindarles a nuestros hijos un entorno que siempre transcurra sin problemas. La disciplina positiva nos anima a utilizar lenguaje y actitudes positivas para ayudar a los niños a desarrollar una actitud optimista y segura para que puedan afrontar los desafíos futuros con valentía. Ésta es también nuestra responsabilidad ineludible como padres.