La foliculitis es una inflamación en la que los pyogenes invaden alrededor de la abertura del folículo piloso y se limitan a la parte superior del folículo piloso. Se puede dividir en purulento y no purulento. Es más común en personas con función inmune baja o pacientes diabéticos. Es más común en la cabeza y el cuello. La foliculitis comienza como un grano rojo, que rápidamente evoluciona hasta convertirse en una pápula-absceso, que luego se seca y forma una costra sin dejar rastro de costra. La erupción es numerosa pero no convergente y produce picazón o un ligero dolor. La foliculitis suele aparecer en las zonas con pelo de los adultos; a menudo ocurre en las zonas con pelo de los niños y puede dejar una pequeña zona de calvicie después de la curación. Los pacientes deben evitar la estimulación física y prestar atención a comer menos alcohol y alimentos irritantes como los alimentos ácidos y picantes. El autor ha descubierto repetidamente que deben comer menos alimentos grasosos, más frutas y verduras, aumentar las vitaminas y mantener las heces suaves. Al mismo tiempo, preste atención a la higiene personal, fortalezca el ejercicio físico y mejore la resistencia a las enfermedades.
Para tratar la foliculitis hay que prestar atención primero a la higiene de la piel y evitar rascados y otras irritaciones. Especialmente la cabeza, porque hay mucho pelo, glándulas sebáceas y sudoríparas, además de mucha excreción, por lo que es necesario mantenerla limpia e higiénica. Los pacientes deben intentar comer alimentos y grasas animales menos irritantes y mantener las deposiciones todos los días. Si es un paciente diabético, debe tratarlo rápidamente para prevenir la foliculitis. El tratamiento farmacológico incluye principalmente tres aspectos:
1. Tratamiento sistémico: cuando las lesiones cutáneas son extensas y hay pus evidentes, se deben administrar antibióticos de amplio espectro. Si es posible, el pus se puede enviar para cultivo y pruebas de sensibilidad a los medicamentos, lo que tiene una importancia importante como guía para seleccionar fármacos más eficaces. 2. Inmunoterapia: los pacientes con ataques crónicos recurrentes pueden recibir la vacuna contra los forúnculos por vía subcutánea una vez a la semana. La dosis inicial es de 0,5 ml, la segunda dosis es de 1 ml, la tercera dosis es de 1,5 ml y luego 2 ml cada vez. Generalmente no hay reacciones adversas después de la inyección. Si experimenta fiebre u otras molestias, no aumente la dosis. Si es necesario, reduzca la dosis o suspenda su uso. 3. Terapia local: las lesiones cutáneas locales no deben lavarse con agua para evitar rasguños. Las lesiones cutáneas deben tener pelo corto, desinfección local y agua para aliviar la picazón. Los pacientes con exudación pueden utilizar una solución de Rivanol 0,1 para compresas húmedas, de 3 a 4 veces al día, durante 20 minutos cada vez. Una vez aliviada la inflamación, se pueden utilizar externamente 2 emulsión de cloranfenicol, 0,5 ungüento de neomicina y 3 tintura de yodo.
Jaja, ¿es esto una cita? Te deseo una pronta recuperación.