Según la teoría de la relatividad de Einstein, el enorme movimiento de los cuerpos celestes en el universo distorsionará el espacio y el tiempo y se propagará como ondas gravitacionales. En 2016, científicos de muchos países detectaron por primera vez ondas gravitacionales. El plan de detección de ondas gravitacionales de mi país también se implementa activamente. Recientemente, los medios de CCTV entrevistaron al académico Luo Jun, una figura clave en el plan de detección de ondas gravitacionales "Tianqin".
En un refugio antiaéreo bajo la montaña Yujia de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong en Wuhan, Hubei, el académico Luo Jun y su equipo están desarrollando un dispositivo de detección de ondas gravitacionales.
Luo Jun, académico de la Academia de Ciencias de China, afirmó que este dispositivo coloca tres satélites en órbita a unos 100.000 kilómetros de altura sobre la Tierra, conectados por láseres. Cuando llegan ondas gravitacionales, el espacio se estira por un lado y se contrae por el otro. Esta distancia de estiramiento es sólo del nivel del picómetro (el tamaño de un átomo). Este dispositivo parece un arpa en tres dimensiones, y las ondas gravitacionales son las manos de Dios que pulsan las cuerdas, por eso este proyecto se llama "Lyra".
En el futuro, colocando un dispositivo de este tipo en el universo se podrán medir cambios en el espacio y el tiempo. El proyecto "Tianqin" lanzará tres satélites alrededor de 2030 para formar un sistema espacial de observación de ondas gravitacionales para detectar las ondas gravitacionales de frecuencia intermedia de Haohertz que están ampliamente presentes en el universo.