Te amo más que a nadie.
A altas horas de la noche, tu teléfono se siente solo y escuchas una voz.
Es particularmente lamentable que ambos estén tan separados.
Tus ojos ya no son pupilas.
Te he estado protegiendo.
Caminando al mismo tiempo, recorriendo el mismo camino en la máquina de la memoria...
Ahora, créeme y jura.
No olvides su sonrisa cuando mira hacia otro lado.
Aunque no es algo bueno, no hay necesidad de llorar.
Por supuesto, no estás solo.
Bajo la fría lluvia, las dos personas se marcharon sin paraguas.
A partir de ahora siempre estarás a mi lado
Amor, ganas de dar...
Lo que ves ya no siempre te protege.
He estado pensando en renunciar al amor en el futuro.
Amor, quiero dar...