Las líneas de "Let the Outline Be Obscured" adquieren mayor importancia en la historia del teatro porque la gente estaba dispuesta a repetirlas como loros.
Para engañar, debes reclamar rígidamente tus absolutos, enfrentar a tus enemigos y darles una excusa agradable y torpe para apartarse de tu camino.
¡Después de todo nuestro oro, déjame desamparado! ¡Siempre mía! ¡Oblígame!
El Décimo Ejército sale a la batalla El arma clave no es su cabeza sino sus plumas, y tú sostienes en tu mano una historia absurda escrita con sangre.
Lo juro, estos bahreiníes tienen miedo, reclutaste a mi padre para burlarte de mí, muero, aprecio las raíces de mi perseverancia.