En el invierno de 1953, el poderoso salto de una mujer china atrajo la atención del mundo.
En los Juegos de Atletismo de Beijing el 6 de noviembre, la atleta china Zheng, de 20 años, rompió el récord mundial de salto de altura femenino con una puntuación de 1,77 metros.
El nuevo récord es el primer récord mundial femenino de la República Popular China y supera en 1 centímetro al antiguo récord de la estadounidense Mildred McDaniel.
Este salto también convirtió a Zheng en el primer atleta asiático en batir el récord mundial de atletismo desde 1936.
Aunque la brecha es pequeña, este salto récord fue descrito por los medios extranjeros como un "salto explosivo" porque creó el primer récord mundial de atletismo de China.
Conocido como "Chunyan despierta los deportes chinos", Zheng envió un mensaje al mundo de que China ya no es el "hombre enfermo de Oriente".
Zheng nació en Jinan, provincia de Shandong. Mide 1,70 metros, tiene una buena forma física y puede saltar con tanta precisión como unas tijeras, algo poco común entre los deportistas de élite del mundo.
Una vez saltó 1,78 metros, estableciendo un récord nacional en 1963.
Se ganó un lugar en la historia del deporte cuando su logro entró en el Libro Guinness de los Récords Mundiales.
Por su contribución al deporte, Zheng ha recibido una serie de honores. Fue nombrada la mejor atleta del país en 1984.