La vida del emperador Wu de la dinastía Han
El emperador Wu de la dinastía Han nació en el año 156 a.C. y era el hijo mayor de Han Jing. Ascendió al trono en el año 141 a.C. a la edad de 16 años. Durante su reinado, la política, la economía, la cultura, la ciencia y la tecnología de China lograron grandes avances. Promovió vigorosamente la producción agrícola, fortaleció el gobierno de las minorías étnicas y fortaleció los intercambios exteriores, lo que mejoró enormemente la fuerza nacional y el sustento del pueblo de la dinastía Han.
La vida de la princesa Pingyang
La princesa Pingyang, cuarta hija del emperador Wu de la dinastía Han, nació en el año 72 a.C. Ella es inteligente, hermosa y de buen corazón. Pasó por muchos altibajos en su vida, pero siempre mantuvo su dignidad y nobleza.
El emperador Wu de la dinastía Han y la princesa Pingyang tenían profundos sentimientos por su padre y su hija.
La afectuosa relación padre-hija entre el emperador Wu de la dinastía Han y la princesa Pingyang es una de las historias familiares más famosas de la historia. El emperador Wu de la dinastía Han amaba mucho a su hija. La consideraba la niña de sus ojos y la cuidó mucho en la vida y la política. Cuando la princesa Pingyang se casó, el emperador Wu de la dinastía Han construyó especialmente un palacio para ella para que pudiera vivir una vida feliz. La princesa Pingyang también amaba mucho a su padre. A menudo escribía cartas al emperador Wu de la dinastía Han para expresarle sus pensamientos y gratitud.
La legendaria experiencia de la princesa Pingyang
La princesa Pingyang experimentó muchos altibajos en su vida. Una es que se casó con el Khan de los hunos, quien no la amaba e incluso abusó de ella. Más tarde, la princesa Pingyang aprovechó la oportunidad para escapar y fue rescatada por Huo Qubing, el general del emperador Wu de la dinastía Han, y regresó a China. Más tarde, la princesa Pingyang se casó con Zhao Tuo, rey de Nanyue, pero Zhao Tuo no la respetó y a menudo la golpeaba y regañaba. Al final, la princesa Pingyang huyó a China y vivió una vejez pacífica.