La marca de coches Opel ha parado su producción. La razón es que los automóviles Opel fueron adquiridos por el fabricante de automóviles francés Grupo Peugeot Citroën (Grupo PSA) en 2017 y finalmente decidió detener la producción de automóviles Opel. Esto se debe a que las ventas de la marca Opel en el mercado europeo no han sido las ideales y se enfrenta a una competencia feroz. El Grupo PSA decidió centrar sus recursos en las marcas Peugeot y Citroën para mejorar su competitividad. Por tanto, el cese de la producción de automóviles Opel tiene como objetivo optimizar la estructura empresarial del grupo y dedicar recursos a marcas más prometedoras. Esta es también una manifestación común de ajuste estratégico y adaptación del mercado en la industria automotriz.
En términos de expansión, la competencia en la industria del automóvil es cada vez más feroz y muchas marcas de automóviles tienen que realizar ajustes y optimizaciones para adaptarse a las necesidades y cambios del mercado. Las suspensiones de producción como las de Opel no son infrecuentes y muchas marcas se enfrentan a situaciones similares. Para los consumidores, esto significa que deben ser más racionales y completos a la hora de elegir una marca de automóvil para garantizar que la marca que compran tenga garantías estables de producción y posventa. Al mismo tiempo, esto también recuerda a los fabricantes de automóviles que deben prestar mucha atención a las tendencias del mercado y ajustar de manera flexible las estrategias de marca para mantener la competitividad y la participación de mercado.