Cuando Zhao Wanlong fundó Zhengwan Group a principios de los años 80, sólo tenía un pequeño taller y algunas máquinas manuales, sin ningún apoyo financiero ni técnico. Construyó este negocio desde cero únicamente gracias a su arduo trabajo y espíritu emprendedor.
Experimentó innumerables dificultades y reveses, pero persistió y finalmente lo logró.
Esta es también una de las historias típicas de muchos empresarios en China desde la reforma y la apertura.