Hoy en día, la persecución de estrellas es muy popular entre los adolescentes, especialmente entre muchos estudiantes de secundaria.
Cuando se trata de los síntomas del culto a las celebridades, el factor principal que quiero mencionar es la imitación. Con un amor ciego por sus ídolos, los adolescentes creen firmemente que su elección es lo mejor en la vida. Como resultado, la vestimenta, el peinado y las aficiones de las celebridades, así como su comportamiento en público, son observados o seguidos de cerca, aunque hasta cierto punto, a veces inapropiados o incluso ridículos.
Sin embargo, como todos sabemos, los ídolos se pueden encontrar en todas partes, pero solo existe un yo. ¿En qué parte del mundo estás cuando imitas a otra persona? Nadie puede reemplazarte a menos que te rindas. Además, la imitación no significa simplemente abandonar los propios objetivos. Como deambulas sin rumbo por el camino de la vida, el fracaso es previsible y no podrás disfrutar de la fama de tu ídolo ni ganar nada con tu desordenado trabajo escolar. En última instancia, tienes que morder la bala tú mismo.
En lo que a mí respecta, nuestro futuro debería depender más del conocimiento que de la adoración de las estrellas. Los científicos son las personas que ayudan a hacer avanzar el curso de la historia. Necesitamos centrarnos en estudiar y contribuir lo más posible a la sociedad.
Así que me opongo firmemente al culto a las estrellas y me alegra escuchar sus voces.
La traducción es la siguiente:
Hoy en día, el comportamiento idolátrico es muy popular entre los adolescentes, especialmente entre muchos estudiantes de secundaria.
Hablando de las desventajas de adorar a las celebridades, el factor principal que quiero mencionar es la imitación. Un joven se enamora ciegamente de su ídolo, creyendo firmemente que su elección es lo mejor de la vida. Como resultado, prestamos mucha atención o imitamos la ropa, los peinados, los pasatiempos y el comportamiento de las celebridades en público. Sin embargo, hasta cierto punto, estos escritos son inapropiados e incluso absurdos.
Pero, como todos sabemos, los ídolos abundan. Pero soy el único. ¿Dónde estás cuando imitas a otra persona? Nadie puede reemplazarte a menos que te rindas. Además, la imitación no significa simplemente abandonar los propios objetivos. Deambulas sin rumbo por el camino de la vida, puedes prever que fracasarás, no podrás disfrutar de la fama de tu ídolo y no conseguirás tu excelente trabajo escolar. Al final sentirás dolor.
En mi opinión, nuestro futuro debería depender más del conocimiento que de la adoración ciega. Los científicos ayudan a avanzar el curso de la historia. Necesitamos centrarnos en la investigación y contribuir lo máximo posible a la sociedad.
Así que me opongo firmemente a la idolatría y me alegra escuchar su apoyo.