2. Comprender la historia sólo nos hará más inteligentes, aprenderemos lecciones y resumiremos experiencias para que podamos tener una mejor visión del futuro.
3. La historia se ha convertido en pasado, ahora sólo podemos captar el presente.
Si estamos obsesionados con la historia, entonces la sociedad nunca progresará y sólo afrontará el declive de los tiempos.