El sufrimiento agudiza el carácter

Nadie puede navegar sin problemas durante cien años de vida. El destino siempre pone obstáculos en nuestro camino y nos hace pasar por diversas dificultades. Mirando hacia atrás en el pasado, descubriremos que el camino que hemos recorrido es sagrado y que el sufrimiento es en realidad el tesoro de la vida, que brilla con un brillo dorado.

El sufrimiento es riqueza, inspira a las personas a seguir adelante. Mencio dijo una vez: "Si quieres ser grande, primero debes forzar tu mente, forzar tus músculos, matar de hambre a tu cuerpo y estropear tus acciones. Por lo tanto, puedes soportarlo porque eres incompetente. Sí, si quieres". Para lograr algo, los logros primero deben pasar por dificultades. La gente es inerte. Una vida cómoda, como el agua persistente, diluirá gradualmente sus ambiciones, mientras que el sufrimiento, como morder agua helada, mantendrá a la gente con la cabeza lúcida y sabiendo lo que están haciendo. Debido a esto, el rey Gou Jian de Yue hizo lo mejor que pudo y Sun Kang estudió mucho. El color dorado del sufrimiento brilla en el camino ideal, oscureciéndolo y haciendo que las personas avancen sin dudarlo.

El sufrimiento es riqueza y agudiza el carácter. Hay un viejo dicho: "El filo de una espada proviene del temple, y la fragancia de las flores de ciruelo proviene del frío intenso". Cuando las personas experimentan dificultades, se transforman por completo. El color dorado del sufrimiento alguna vez brilló en el cuerpo humano; eliminando colores como la pereza, la mezquindad y la agresividad, dejando a las personas con una cualidad similar al jade y el verdadero rostro de la vida.

Siempre hay personas que malinterpretan el color del sufrimiento. Algunas personas dicen que el sufrimiento es negro, por eso sucumbieron y fueron golpeados en las rocas por las enormes olas del destino. Algunos dicen que el sufrimiento es gris, por eso se puede escapar y nunca ver el verdadero rostro de la vida, pero yo digo que el sufrimiento es oro, el fuego de la alquimia, y las enormes olas del lavado son los granos de arena necesarios para formar perlas; y son la gran riqueza de la vida. Así como no hay caballos en las llanuras, pero se pueden encontrar parejas en las cimas de las montañas. El sufrimiento es riqueza con luz dorada, que hace la vida hermosa y le permite alcanzar sus objetivos sin arrepentimientos.

Por eso, debemos ser amables con la riqueza del sufrimiento y dejar que la vida brille con un brillo dorado como ella. Por eso, debemos mantener la cabeza en alto y afrontar el sufrimiento con una sonrisa. ¡Con esta riqueza la vida puede ser invencible!