(1) Algunos colegios y universidades no prestan suficiente atención a la educación ideológica y política.
Los líderes universitarios conceden gran importancia a indicadores concretos como el tamaño de las escuelas y el número de profesores, y consideran la educación ideológica y política de los estudiantes universitarios como una tarea fácil. No reciben atención activa y consciente ni la correspondiente inversión material. , lo que resulta en cambios serios de educación ideológica y política en las universidades. La razón profunda de esta situación reside en el sistema educativo orientado a los exámenes y en la definición de "talento" en la sociedad actual. Para presentarse a los exámenes sólo se valora la educación intelectual y se desprecia la educación moral. Para prepararse para el examen sólo se centran en la enseñanza y adquisición de conocimientos y subestiman la transformación de habilidades. Los educadores ideológicos y políticos que participan en el trabajo educativo bajo este sistema educativo están destinados a encontrarse en una posición pasiva. Hoy en día, los llamados talentos suelen enfatizar las cualidades científicas y culturales de los individuos, mientras que las cualidades ideológicas y morales pasan a un segundo plano. Esta definición y comprensión de los talentos sin duda llevará a los colegios y universidades a conceder importancia a la enseñanza del conocimiento científico y cultural, mientras descuidan el cultivo de las cualidades ideológicas y morales de los estudiantes universitarios.
(2) El método de impartir conocimientos es único y carece de actividades prácticas de educación ideológica y política.
Nuestra educación ideológica y política, tanto en contenidos como en métodos, carece de formación y práctica para variar. grados, el fenómeno de transferencia de conocimiento puro es más grave. De hecho, la educación ideológica y política es una materia altamente práctica, y su objetivo principal es cultivar hábitos de comportamiento y actitudes y habilidades prácticas que unen conocimiento y acción. Es imposible lograr los resultados deseados simplemente utilizando el adoctrinamiento y los métodos de enseñanza abarrotados. Como cuerpo principal de la práctica educativa ideológica y política, los educados deben participar en diversas actividades dentro y fuera de la escuela. Pero, de hecho, las actividades prácticas de los estudiantes son siempre sólo una formalidad, lo que inevitablemente conduce a la incapacidad de las normas sociales para internalizar la ética ideológica y política de los educados, y mucho menos para externalizar lo ideológico, político y moral de los educados en un comportamiento moral.
(3) Los métodos y métodos de educación ideológica y política en los colegios y universidades están atrasados y no pueden adaptarse al desarrollo de los tiempos.
Hoy en día, con el rápido desarrollo de las altas y nuevas tecnologías, especialmente la tecnología de la información, Internet se ha convertido en un nuevo vehículo para la difusión de la ideología y la cultura, un nuevo escenario para las luchas de la opinión pública y un nuevo e importante posición para el trabajo ideológico y político. Internet está abierto. En Internet hay mucha información positiva, saludable y beneficiosa, pero también mucho contenido reaccionario y supersticioso.