Después de la Primera Guerra Mundial, Estados Unidos se convirtió en el número uno del mundo, ampliando aún más la influencia del inglés en el mundo.
En los tiempos modernos, Gran Bretaña y Estados Unidos han producido muchos escritores de talla mundial, como Dickens, Hardy, Mark Twain, Hemingway, etc. La literatura británica ocupa el primer lugar en la literatura mundial.
Los Estados Unidos contemporáneos ocupan una posición dominante en la economía y el comercio mundial, lo que hace del inglés un idioma popular en los negocios internacionales.