Edimburgo (inglés, escocés: Edinburgh; gaélico escocés: dün? Ideaann) es la capital de Escocia, Inglaterra, situada en la costa sur del Firth of Forsyth en las tierras bajas centrales de Escocia. Cubre una superficie de unos 260 kilómetros cuadrados.
Fundada en 1329, fue la capital de Escocia entre 1437 y 1707. La fabricación de papel, la imprenta y la edición tienen una larga historia, y también son importantes la construcción naval, la industria química, la energía nuclear, la electrónica, los cables, el vidrio y la industria alimentaria. Con el desarrollo de los yacimientos petrolíferos del Mar del Norte, se establecieron una serie de industrias y servicios relacionados. Importante centro de transporte, aeropuerto.
Las características de la ciudad de Edimburgo
Edimburgo es la ciudad más distintiva de Escocia. Edimburgo es única por su proximidad a Inglaterra, su población multicultural y su floreciente industria turística. En Edimburgo hay varios clubes ubicados en edificios construidos en el siglo XV. Hay muchos hombres que escupen fuego fuera de los edificios de la era georgiana, una fusión del tiempo y el espacio antiguo y moderno.
Cada verano, Edimburgo acoge el festival artístico más grande del mundo, lo que hace que las calles de la ciudad estén llenas de actividad. Edimburgo también tiene sus desventajas, como el entorno residencial insatisfactorio y el clima cambiante.
Pero no renuncies a encontrar la belleza de Edimburgo. Edimburgo es una mezcolanza, pero su personalidad cultural es mucho más de lo que unos pocos fumetas pueden representar. La cultura tradicional escocesa debería hacerte sentir cálido por dentro.