1. Precisión: si el contenido traducido es exacto y coherente con el significado original.
2. Fluidez del idioma: Si las frases traducidas son fluidas y la gramática es correcta.
3. Selección de vocabulario: Si el vocabulario utilizado es apropiado y si puede expresar con precisión el significado del texto original.
4. Formato y puntuación: Si el formato de la frase traducida es correcto y si la puntuación está estandarizada.
5. Impresión general: ¿Cuál es la calidad general de la traducción y si se ajusta a los hábitos de lectura?
El método de puntuación específico puede variar según la institución examinadora y algunos también pueden considerar otros factores como la innovación y el arte de la traducción.