Al entregar frutas, o mientras comes, aprovecha para entregar un trabajo corto y ver la respuesta del maestro. Es bueno si quieres, y a los profesores también les gusta que los buenos estudiantes los molesten, no importa si no quieres, aun así tienes que darle las gracias (no hagas que parezca una ayuda extra para ellos); un pequeño trozo de papel).
Lo anterior es un ambiente amigable que resuelve problemas sin vergüenza.