Según el Servicio de Datos de Ingresos (IDS), parece que a medida que el Reino Unido se acerque a 1, muchas empleadas serán tratadas como hombres, aunque la mitad de ellas trabajen a tiempo parcial. El IDS predice que es más probable que las pérdidas de empleo en los próximos meses sigan afectando más a los trabajadores a tiempo parcial que a las mujeres, dejando más trabajadores masculinos a tiempo completo disponibles.
"Si estas tendencias continúan, el ritmo de la recuperación económica puede acelerar el aumento de la fuerza laboral a tiempo parcial de mujeres, que están empleadas principalmente en la industria de servicios", dice el informe.
Estas tendencias no se limitan al Reino Unido. En toda Europa y América del Norte, y cada vez más incluso en Japón, la proporción de trabajadoras en la fuerza laboral está aumentando constantemente, mientras que la proporción de trabajadores varones sigue disminuyendo. Los resultados de esta tendencia son obvios, porque las mujeres son el sector de servicios dominante y porque muchas de ellas trabajan a tiempo parcial. En los países más desarrollados del mundo, los ingresos de los hogares permanecerán congelados o incluso caerán. A medida que se vuelve más difícil encontrar empleos manufactureros bien remunerados y las empresas trasladan la producción a mercados de menor costo, las tasas de desempleo masculino han aumentado aún más en muchos países de Asia en desarrollo, América Latina y África, con tasas que no bajan del 10 al 100%. Cómo estos cambios en la fuerza laboral en el Reino Unido y otros países desarrollados afectan la política nacional, el desarrollo social y las relaciones familiares es una pregunta importante que los investigadores buscarán responder durante la próxima década.