Por ejemplo, los padres siempre creen que la gestión financiera es un asunto de adultos y los niños no necesitan hacerlo. Hay que disipar este concepto. Sabemos que muchos niños extranjeros se convierten en expertos financieros en la escuela, y este tipo de pensamiento también influye mucho en el camino hacia el éxito futuro. También es erróneo pensar que la gestión financiera es una cuestión de gente rica y que el dinero pequeño no requiere gestión financiera. Los edificios altos se levantan del suelo sin los cimientos que se utilizan para edificios tan altos.
Así que, a la hora de acumular riqueza, no pienses que si tienes poco dinero, no tendrás dinero sin una gestión financiera. De hecho, la gestión financiera es un aspecto muy importante en la formación de la inteligencia financiera de los niños. Si administra bien sus finanzas, podrá administrar mejor las finanzas internas de su familia cuando se case en el futuro.
Se recomienda prestar atención a los dos puntos siguientes al aprender gestión financiera.
1. Gestión financiera, primero establezca una "pequeña meta". La vida requiere planificación, y la gestión financiera también requiere metas y planes.
Al establecer un plan de vida, es necesario saber cuándo casarse, cuándo comprar una casa o un automóvil, y luego establecer puntos de tiempo de acuerdo con este plan de vida para establecer metas financieras. Al formular un plan financiero, es mejor establecer "pequeñas metas" escalonadas según cada etapa. Al hacer un plan, hágalo factible y lo más detallado posible.
En segundo lugar, desarrolle el buen hábito de llevar cuentas. La contabilidad es el punto de partida de la gestión financiera y el centro de la gestión de fondos.
No solo puedes conocer claramente los detalles de los gastos mensuales a través de la contabilidad, sino que también puedes tener la comprensión más intuitiva del dinero y también puedes ver los cambios en los precios cada mes. Mientras lleva la contabilidad, podrá comprender gradualmente qué tiene que gastar, qué puede ahorrar, qué significa gastar dinero y qué impacto tendrá en las finanzas generales del mes, estableciendo así una visión familiar del dinero.