1. Observación y supervisión por parte del supervisor: El supervisor observará de cerca el comportamiento de cada candidato, incluyendo ojos, gestos, postura corporal, etc. Se prestará especial atención a si los candidatos tienen algún comportamiento o comportamiento anormal para detectar trampas a tiempo.
2. Registros de vigilancia: Los supervisores registrarán el comportamiento de los candidatos, especialmente los candidatos con comportamiento sospechoso. Los registros se pueden utilizar como base para determinar si un candidato ha hecho trampa.