Una rejilla es una estructura de marco utilizada para soportar y fijar edificios u otras estructuras. Generalmente está compuesta por muchas varillas y conectores rectos o curvos. Pueden ser metálicos, como barras de acero, aleaciones de aluminio, etc., o no metálicos, como madera o plástico. Las estructuras de rejilla se utilizan ampliamente en la construcción, la aviación, la industria automotriz, la industria energética y otros campos. Generalmente tienen las ventajas de ser livianas, fuertes, resistentes a la corrosión y fáciles de instalar y mantener.
Según los diferentes métodos de construcción y campos de aplicación, las estructuras de rejilla se pueden dividir en muchos tipos diferentes. Los más comunes son los tejados de rejilla y los puentes de rejilla. Un techo de rejilla es una estructura que divide una gran área de techo en muchos pedazos pequeños. No solo mejora la estabilidad de todo el techo, sino que también dispersa la presión del viento y las fuerzas sísmicas al fortalecer la estructura del marco. Alternativamente, un puente de rejilla es una forma similar a un rompecabezas de conectar muchos componentes individuales del puente para crear un camino que conecta dos ubicaciones.
Las estructuras de cuadrícula tienen muchas aplicaciones de amplio alcance. En el campo de la arquitectura, las estructuras reticulares se utilizan a menudo en el diseño de cubiertas en voladizo, estadios, salas de exposiciones, estaciones de ferrocarril, etc. En el campo de la aviación, las estructuras de rejilla se pueden utilizar para fabricar componentes tales como fuselajes, alas y soportes estructurales de aviones. En la industria automotriz, las estructuras de rejilla también se utilizan ampliamente en la fabricación de chasis y componentes de carrocería de automóviles. Además, la estructura de red también tiene importantes aplicaciones en el campo de la energía eléctrica, construcción naval, ingeniería militar, etc.