Las hojas de té viejas y gruesas se refieren a hojas de té que han sido envejecidas y envejecidas, con una textura más dura y un color más oscuro. Sus funciones principales son las siguientes:
1. Reducir los lípidos en sangre: las hojas de té viejas y ásperas contienen más catequinas, polifenoles del té y otras sustancias, que pueden promover el metabolismo de las grasas, reducir los lípidos en sangre y son útiles para prevenir la hiperlipidemia. . La enfermedad y la arteriosclerosis tienen un papel determinado.
2. Antioxidante: los polifenoles del té y otros componentes del té crudo tienen fuertes efectos antioxidantes, pueden eliminar los radicales libres, retrasar el envejecimiento celular y tener ciertos efectos en la prevención del cáncer, enfermedades cardiovasculares y otras enfermedades. .
3. Mejora la digestión: Los polifenoles, catequinas y otras sustancias del té crudo pueden promover la peristalsis intestinal, aumentar la secreción de jugos gástricos, mejorar la función digestiva y son beneficiosos para prevenir el estreñimiento y las enfermedades gastrointestinales.
4. Pérdida de peso: Las catequinas del té crudo pueden promover la descomposición y el metabolismo de las grasas, reducir la acumulación de grasa en el cuerpo y ayudar a perder peso.
5. Antifatiga: Las catequinas y otras sustancias del té crudo pueden dilatar los vasos sanguíneos, aumentar el flujo sanguíneo, aliviar la fatiga y ayudar a mejorar la inmunidad y la resistencia del cuerpo.
Cabe señalar que las hojas de té viejas y gruesas contienen más catequinas, teofilina y otras sustancias. Beber en exceso producirá efectos estimulantes y tendrá un impacto negativo en el sistema cardiovascular. Por lo tanto, es necesario controlar adecuadamente la cantidad que se bebe antes de beber para evitar efectos adversos en el organismo.