1. Ayuda al desarrollo del lenguaje
Los expertos en pediatría dicen que el período de preparación para la producción del lenguaje de los niños es bastante largo. Antes de la luna llena se produce la etapa de vocalización refleja, que es un reflejo de las necesidades fisiológicas. Un mes después, apareció la pronunciación refleja condicionada. Diferentes sonidos representan diferentes significados, y mi madre podía escucharlos aproximadamente dos meses y medio después, comencé a aprender inglés, traté la pronunciación como un placer y 6 meses después practiqué activamente la pronunciación. Ya puedo "entender" algunas palabras y responder correctamente; alrededor del año, puede pronunciar otras palabras. Si presta atención a hablar con su hijo durante el período de preparación de la producción del lenguaje y lo guía para que se prepare para escuchar y hablar, se puede promover el desarrollo del lenguaje de su hijo.
2. Favorece el desarrollo intelectual
Hablar más con tu bebé también es útil para desarrollar su inteligencia. Por ejemplo, guiarlo para que distinga diferentes sonidos, permitirle seguir el sonido para encontrar su fuente y distinguir los objetos representados por el lenguaje puede desarrollar sus habilidades de percepción. Hablar con el bebé puede ayudarlo a adaptarse gradualmente al entorno de vida que lo rodea, especialmente al entorno lingüístico, lo que será beneficioso para el desarrollo de su adaptabilidad social.
3. Potenciar la capacidad cognitiva
Un estudio de la Universidad Northwestern en Estados Unidos demuestra que aunque el bebé no pueda hablar, el sonido tiene un gran impacto en la capacidad cognitiva del bebé. Para bebés de hasta 3 meses, las palabras son más influyentes que otros sonidos, incluida la música.
Aumenta tu sensación de seguridad
Hablar con tu bebé es una conexión emocional con él. La expresión, el tono y la actitud del hablante pueden hacer que el bebé se sienta seguro. Una sensación de seguridad y una buena comunicación emocional son nutrientes espirituales indispensables para el bebé.
Así que no dejes de hablar con tu bebé. Esto le ayudará mucho. No seas un padre silencioso ni una madre tranquila. Crea un buen lugar para que tu bebé se comunique.