Responder desde diferentes ángulos. De hecho, a veces el profesor no quiere escuchar la "respuesta correcta", sino que quiere poner a prueba tu flexibilidad. Si no conoces el problema del profesor, puedes empezar desde diferentes ángulos.
Expresar sus puntos de vista. No sé mucho sobre este tema, pero hasta donde yo sé, este tema...
Toma la iniciativa. No sea demasiado pasivo al realizar el reexamen del examen de ingreso de posgrado. Cuando el profesor pregunta sobre conocimientos que no comprende, podemos guiarle hacia áreas con las que estamos familiarizados. Por ejemplo, al responder la última pregunta, puedes mencionar en qué eres bueno, para que el profesor te haga preguntas sobre tus intereses.
No pierdas el tiempo. Independientemente de si puedes responder las preguntas del profesor o no, no entres en pánico. Ya sabes, si el profesor hace una pregunta difícil, los demás también la harán. Los profesores veteranos saben qué preguntas los estudiantes pueden responder y qué preguntas no pueden responder. Así que no entres en pánico sólo porque no puedes responder una pregunta: tu mente está agotada... y luego no puedes responder otras preguntas porque estás nervioso.