Mejorar las habilidades lingüísticas
La lectura de libros ilustrados proporciona a los niños un rico vocabulario y patrones de oraciones, estimula su deseo de expresarse y hace del lenguaje un puente entre las almas.
Estimula la imaginación y la creatividad
Las imágenes del libro ilustrado se dejan en blanco, dando a los niños espacio ilimitado para la imaginación. Podrán pasear por la historia a su antojo, vivir aventuras con los personajes del libro y dar rienda suelta a su infinita creatividad.
Desarrollar habilidades emocionales y sociales
Los elementos emocionales del cuento reflejan el mundo interior de los niños. A través de la interacción con los personajes del libro, pueden comprender mejor la amistad, el amor y el afecto familiar, y mejorar su inteligencia emocional.
Ampliar horizontes cognitivos
Los libros ilustrados cubren todo tipo de conocimientos, desde la ciencia hasta la historia, desde la cultura hasta el arte. Leer libros ilustrados es como tener la clave para explorar el mundo, guiando a los niños hacia él. El palacio del conocimiento.
Desarrolla hábitos de lectura
Sigue leyendo y haz de la lectura parte de la vida de tu hijo. Gradualmente adquirirán el hábito de leer todos los días, sentando una base sólida para el aprendizaje y el crecimiento futuros.
Mejora la atención y la concentración
La historia del libro ilustrado es fascinante y permite que los niños participen plenamente en el proceso de lectura. Esto ayudará a desarrollar su atención y concentración para que puedan afrontar mejor el aprendizaje y los desafíos.